RE: Can visual tools help evaluators communicate and engage better? | Eval Forward

Estimada Harriet,
Qué gran debate y cuántas reflexiones interesantes. Me gusta el comentario de Kombate sobre la capacidad de las herramientas visuales para aumentar el impacto. Viniendo de una experiencia en medios de comunicación, estoy de acuerdo en que el uso de herramientas visuales durante el proceso de evaluación permite contar una historia más convincente después de que la evaluación se ha completado (y publicado) - o mientras se está llevando a cabo, para el caso.

En cuanto al aprendizaje, la Oficina de Evaluación del PMA ha realizado una encuesta entre las partes interesadas en la evaluación sobre los productos de comunicación y el uso de las pruebas. A continuación se exponen algunas conclusiones:

  • Sobre la cuestión de cómo canalizar, empaquetar y presentar mejor los datos para que resulten útiles, el 31% de los destinatarios indicaron informes más breves con un lenguaje más sencillo, el 28% destacaron el alcance, con preguntas y resultados más pertinentes, el 17% destacaron los procesos, el 10% la accesibilidad y la canalización, el 9% la variedad con productos más adaptados y el 5% indicaron la puntualidad.
  • En general, los productos de evaluación más breves (como los informes de evaluación resumidos) obtuvieron una calificación de utilidad mucho más alta que los informes de evaluación completos: 81% frente a 58%.
  • Los productos como los resúmenes y las infografías obtuvieron un mayor índice de utilidad entre los directores y altos directivos.
  • Aunque de los resultados se desprende claramente la necesidad de textos más breves, cuando se les preguntó por el formato preferido para recibir la información de evaluación, la mayoría de los encuestados siguieron indicando la lectura (74%), seguida de la comunicación oral (65%), el vídeo (56%) y el audio (39%).

Traducir la información de la evaluación a un lenguaje visual requiere conocimientos especializados que podrían ser específicos del contexto y sensibles a la cultura. Soy una gran defensora del uso de la visualización en los procesos y productos de evaluación; sin embargo, es importante tener en cuenta que determinados públicos pueden seguir necesitando información basada en texto (utilizando la visualización como ayuda al mensaje), mientras que otros pueden preferir recibir todo el mensaje en un formato visual. Por lo tanto, es fundamental comprender las necesidades específicas de información del público para lograr el propósito y el uso de la evaluación.