RE: How do we move forward on Evaluation Systems in the Agriculture Sector? | Eval Forward

Estimados todos,

Es cierto que Rwanda ha obtenido grandes resultados si consideramos los esfuerzos realizados en la gestión de la rendición de cuentas en todos los sectores de actividad. En lo que respecta a la ilustración del tablero de mandos de un automóvil, la eficacia del sistema de evaluación debe considerarse desde la perspectiva holística del sistema de seguimiento y evaluación. De hecho, tanto el seguimiento como la evaluación tienen el mismo objetivo: garantizar la consecución efectiva y eficiente de las metas/objetivos/misión.

La evaluación puede complementar, confirmar o contradecir los resultados de la vigilancia. Al ser más sistemática y rigurosa, la evaluación puede proporcionar explicaciones más creíbles y claras [a los ojos de los interesados] que, por diferentes razones, no pueden ser proporcionadas por la propia vigilancia.  Por consiguiente, si el sistema de evaluación falla como componente del sistema de seguimiento y evaluación, todo el sistema ya ha fallado.

Un sistema de S+E bien elaborado (eficaz) debería:

  • Tratar de integrar, alinear, priorizar, contextualizar y dotar de recursos a las actividades y procesos de seguimiento, evaluación y aprendizaje
  • Apoyar el proceso de diseño y la implementación del programa
  • Adaptarse según sea necesario para seguir siendo relevante, y
  • Contribuir a la rendición de cuentas, el aprendizaje, la adaptación y el logro del propósito del programa.

En ausencia de un sistema nacional de seguimiento y evaluación, el país hace mal uso de los recursos financieros y pierde oportunidades de aprendizaje. Si existiera un sistema nacional de evaluación, éste limitaría el número de evaluaciones a las que realmente valen la pena. También pondría en marcha una estrategia nacional para aprender de los informes de evaluación a fin de fundamentar los futuros diseños y políticas de los programas.

Además, en mi labor de investigación he comprobado hasta cuatro problemas que afrontan los actuales sistemas de vigilancia y evaluación, debido a que todavía no han aprovechado el big data a tiempo el mundo se ha embarcado en una era digital caracterizada por la disponibilidad de información que crece a un ritmo exponencial: las imprecisas medidas de rendimiento, la incapacidad de hacer predicciones fiables que sirvan de base para la planificación futura y los nuevos diseños de programas, el retraso en la aplicación de las medidas correctivas recomendadas por los emprendimientos de evaluación, y la incapacidad de algunos usuarios de comprender y utilizar los informes de vigilancia y evaluación. [Puede ser extraño para muchos, pero puedo proporcionar más información sobre esto si es necesario].  A este respecto, también quisiera destacar que Rwanda ha elaborado y adoptado una Política Nacional de Revolución de Datos en 2017, que dispone que se deben utilizar grandes análisis de datos para vigilar los progresos del desarrollo y las actividades de investigación perspicaces, etc. La clave es que, para impulsar las funciones de seguimiento y evaluación, es necesario que el país se comprometa a instalar sistemas que funcionen bien y a crear capacidad; de lo contrario, persistirán las cuestiones de la rendición de cuentas y la propiedad nacional.

Por último, es necesario aprovechar el compromiso y la voluntad del Gobierno de Rwanda y la sociedad de seguimiento y evaluación para comprobar nuevamente la integridad de las directrices nacionales de supervisión y evaluación [elaboradas el año pasado y para las que hicimos aportaciones] y hacerlas cumplir. Entonces habremos terminado.

Mejor,

Janvier