RE: How are development projects affecting the environment and how do we evaluate this impact? | Eval Forward

Estimada Yosi,

Encantado de saludarte. Me sumo al agradecimiento de Silvia por plantear este tema tan importante. 

No es inusual que algunas organizaciones no sigan los criterios utilizados por sus juntas directivas/comités de programa para aprobar un proyecto ni en el seguimiento ni en la evaluación. De hecho —y éste es un comentario general— el interés por un proyecto a este nivel suele decaer tras su aprobación. Pocas juntas directivas reciben información sobre las consecuencias de sus decisiones, para bien o para mal.  

Por otra parte, y en un intento por responder simultáneamente a las dos preguntas planteadas sobre métodos e indicadores para captar y medir el impacto de los proyectos en el cambio climático y el medio ambiente, mis reflexiones se centran en lo siguiente:

  1. Las salvaguardias medioambientales (y sociales) deberían ser más ambiciosas. Algunos indicadores podrían ayudar a predecir el impacto y se podrían utilizar posteriormente para “demostrar” que un proyecto no causa ningún daño. ¿Qué hay de malo en tener un conjunto equilibrado de indicadores sobre hacerlo bien (no provocar daño alguno)? ¿No contribuiría este enfoque a incluir esto —el hacerlo bien— en una teoría del cambio y/o marco lógico, no tanto como un indicador sino como un resultado en sí mismo, asegurando así que no se olvida? La medida en que el clima se integra en una evaluación depende —al menos en parte— de hasta qué punto es un objetivo integral y fundamental en el diseño del proyecto en cuestión. ¿Creen que se trata de una afirmación demasiado obvia?
  2. En proyectos agrícolas, el interés por sistemas de conocimientos indígenas sobre agricultura y conservación es limitado. Tanto es así, que uno tiene la impresión de que la agricultura “climáticamente inteligente” está necesariamente asociada a la introducción de prácticas y tecnologías externas. Y no estoy siendo ingenuo al afirmar esto. Las comunidades y los diferentes hogares agrícolas poseen distintos niveles de conocimientos y los campesinos plantan sus cultivos por motivos muy diversos. 
  3. ¿Cómo realizan un seguimiento de su entorno, incluidas sus explotaciones agrícolas? ¿De qué manera lo evalúan? ¿No disponen de prácticas y señales válidas (es decir, indicadores) para realizar un seguimiento del impacto, evaluar éste, comunicar la información y adaptarse en consecuencia? Las culturas locales, los sistemas de gobernanza territorial, los medios de vida tradicionales y sostenibles y la experiencia de lo sagrado son perfectamente válidos para este fin.
  4. Ken Wilson sostiene que los proyectos sobre el cambio climático y el medio ambiente requieren métodos e indicadores que reflejen un apoyo discreto, lento, flexible y a largo plazo (https://news.mongabay.com/2022/02/journeying-in-biocultural-diversity-and-conservation-philanthropy-qa-with-ken-wilson/). Además, afirma que estas iniciativas “deben ser desordenadas, útiles y naturales; no prosperan cuando imponemos a nuestros asociados indígenas los estereotipos de la perfección”.
  5. Por último, cuando hablamos de mejoras o cambios en el medio ambiente o en la adaptación al cambio climático y la mitigación de sus efectos, en ocasiones olvidamos dos cosas. En primer lugar, debemos ser más inquisitivos y preguntarnos de qué manera responden al apoyo de los proyectos quienes realizan las mejoras y/o cambios. Y averiguar qué hipótesis formularon los diseñadores de dichos proyectos sobre quiénes reaccionarían al apoyo ofrecido, de qué manera lo harían y por qué motivos. Esto se suele pasar por alto. Nos lanzamos demasiado rápido a “medir” las consecuencias de las respuestas, cegados por marcos lógicos necesitados de esta información y por la impaciencia. En segundo lugar y, tal y como señaló Silva, debemos comprender cómo estas mejoras dependen recíprocamente de la agricultura y los ecosistemas más amplios —en su significado original— y no son incompatibles entre sí. Que se produzcan o no estos avances depende de que la agricultura y los ecosistemas mejoren. Y viceversa. Tomemos la resiliencia como otro ejemplo. ¿Estamos afirmando que la capacidad de un hogar para ser más resiliente depende en gran medida de que acepte lo ofrecido por cualquier proyecto? En otras palabras, ¿la capacidad de los hogares de convertirse en resilientes es independiente de lo que esté pasando y/o del apoyo que se esté proporcionando desde el exterior? Espero que no.

 Disculpen esta extensa respuesta, pero confío en que sea útil.

Shukrani nyingi na bahati nzuri (Muchas gracias y buena suerte en suajili) 

Daniel