I’m Emile N. HOUNGBO (PhD), a Benin citizen, Agricultural Economist Engineer (1996), with a PhD of the University of Abomey-Calavi (Benin) in socio-economics, environment and sustainable development (2008). I’m an Associate Professor at the National University of Agriculture in Benin, where I’m charged of the courses of Rural Economics, Methodology of Scientific Research, Macroeconomics and Project Management. My main research areas are sustainable agriculture, rural socioeconomics, food security, natural resources management, poverty analysis, and climate change. I’m an expert in strategic planning, the development and monitoring-evaluation of agricultural projects and poverty analysis. I has been charged of the monitoring and evaluation of several projects, such as the Fruit Flies West African Project (FF Project, 2014-2016) and the Blast Project (Pyriculariose Project, 2012-2016) both funded by the West and Central Council for Agricultural research and Development (WECARD) and the Project of Local Interventions for Food Security (PILSA, 1997, 2018) funded by the Government of Benin Republic.
My contributions
How to define and identify lessons learned?
DiscussionNeutrality-impartiality-independence. At which stage of the evaluation is each concept important?
DiscussionHow can evaluation help improve data quality and policies on food security during Covid-19 pandemic?
DiscussionRecurring errors in public policies and major projects: contributions and solutions from evaluation
DiscussionFor this purpose, I analysed the process of primary data collection and the food security indicators produced in my country, Benin. As we all know, the quality of statistics depends on the accuracy of primary data, as primary data ultimately condition all subsequent analyses and policies. My research clearly showed some weaknesses in the official statistics. Based on a literature review of the periodic statistics published by the INSAE, the public structure in charge of national statistics in Benin, and on interviews with some data collection agents used for surveys carried out from 2011 to 2018, I found two main
Is this really an output? Addressing terminology differences between evaluators and project managers
DiscussionThe issues facing global agriculture
DiscussionDevelopmental evaluation
DiscussionGender and evaluation of food security
Discussion
Emile Nounagnon HOUNGBO
Agricultural Economist, Associate Professor, Director of the School of Agribusiness and Agricultural Policy National University of AgricultureSaludos a todos,
Evaluar proyectos/programas de desarrollo es una actividad muy delicada. A menudo hay mucho en juego. A menudo, los que comisionan no están dispuestos a asumir los resultados de las evaluaciones. Esta realidad hace que sólo algunos actores estén apegados a la verdad de los resultados de la evaluación, mientras que otros los ven como una exposición o sanción de su ineficacia de gestión. Cuando tenemos la suerte de que una parte de los actores responsables de la ejecución del proyecto/programa desean que se comuniquen los resultados, nos encontramos en una situación feliz. En estos casos, los análisis técnicos y las recomendaciones del evaluador, previamente entregados y aclarados a unos pocos actores clave, deben ser precisos y claros para permitir que se tomen las decisiones pertinentes. Hay que admitir que la evaluación desempeña un papel importante en la mejora de la calidad de la ejecución de los proyectos/programas para aumentar su contribución al desarrollo.
Que yo sepa, los responsables de la ejecución de los proyectos han deseado a menudo que el evaluador participe activamente en la comunicación de los resultados, para darles la mayor credibilidad posible. Las partes interesadas, incluidos los gestores de proyectos, confían más en las deducciones y afirmaciones técnicas del evaluador.
Para mejorar la calidad de la comunicación, sería deseable que el evaluador se encargara del trabajo posterior a la evaluación, en el que los resultados se ponen en forma comunicable para los responsables de la toma de decisiones, los socios y los beneficiarios. Para mayor seguridad, el coste de esta comunicación podría incluirse en la remuneración del evaluador y especificarse en los términos de referencia de la convocatoria que lo contrató. Así se garantizaría que los resultados se comunican sistemáticamente y en buena forma. Pero los que financian y los responsables de la ejecución del proyecto deben estar de acuerdo. Este es el verdadero reto.
Gracias
Dr Emile N. HOUNGBO
[Original contribution in French]